lunes, 24 de febrero de 2014

Haborym El Demonio de Fuego

Bueno continuemos con un poco más de historia sobre sus orígenes de los personajes de esta historia:

Haborym El Demonio de Fuego




 Libro 3
(Casando al Demonio)

Capítulo 3
La historia de Damian

Ahí estaba Yiotish, tratando de meditar cuando de repente una voz atrás de él lo llama

-Veo que tampoco tú puedes dormir. – Es  Damian quien tampoco puede dormir.
-Ha sido un día muy duro y ¿Tú porque no puedes dormir?
-Yo estoy acostumbrado a dormir poco, era parte de mi entrenamiento y así no tener que soñar.
-Sabes cuando veo en tus ojos puedo ver mucho odio, dime ¿A que se debe eso, por que buscas acabar con los demonios?
-Si me dices cuál es tu motivo te diré el mío.
-Yo sigo las ordene del gran Maestro que me envió aquí hace unos años y tu.
-Yo estoy aquí por venganza.
-¿Venganza?, eres muy joven para pensar en venganza, cuéntame cómo llegaste a esto
-MMM… todo sucedió hace unos 10 años cuando tenía 13 años de edad:

“Vivía en una apacible viña al norte de las tierras de Vilcabamba, aún recuerdo ese día como si fuera ayer, era una mañana muy tranquila y alegre , preparando todo para la celebración de la boda de mi hermano mayor con la hija de un antiguo caballero cuya orden ya está extinta, el día parecía marchar con mucho tranquilidad como la mayoría de días, hasta que la villa fue atacada por una horda de demonios y todos en el pueblo fueron asesinados, yo junto con una amiga tratamos de escapar pero los demonios nos alcanzaron, creímos que moriríamos ese día, habíamos tratado de despistarlos al entrar al bosque, pero los demonios tenían muy buen olfato y nos localizaron rápidamente rodeándonos, cuando de repente escuchamos el sonido de una flecha que provenía por detrás de nosotros, esta atravesó el pecho de unos de los demonios y se incrustó en la cara de otro, volteamos para ver de quien se trataba y ahí estaba ella, vestida con una armadura formada por cuero y algunas partes metálicas que cubrían sus hombros, brazos, muslos, piernas y su pecho, su cabeza cubierta por una capucha marrón, portaba 2 pequeñas ballestas, se llamaba Juliet, era una cazadora de demonios, había estado siguiendo el rastro que habían dejado los demonios, ella fue quien nos salvó y también fue nuestra maestra, cuando la conocimos ella tenía solo 20 años y al igual que nosotros había perdido a su familia por un ataque de muertos vivientes y salvada por otro cazador de demonios. “

“Ella nos llevó a un sitio llamado las “Tierras del Terror”, un territorio olvidado lejos de la soberanía de cualquier nación, donde viven y entrenan los cazadores de demonios, una de las cosas que cuentan de esas tierras es que alguna vez fue una gran nación, pero hace 20 años se abrieron diversos portales y muchos demonios infernales salieron de ahí, hasta hoy en día se abren portales por donde salen demonios, es para nosotros los cazadores sin duda el mejor lugar donde entrenar, antes de a buscar a otros demonios fuera de las fronteras de estas tierras, ahí aprendimos a usar la ballesta así como otras armas, a crear trampas y a dominar nuestra ira (disciplina)para utilizarla de la manera adecuada contra los demonios.”

-¿Y qué paso después? – Pregunta Yiotish.
-Lo que tenía que pasar, después de algunos años de entrenamiento nos separamos de nuestra maestra y fuimos por caminos diferentes buscando demonios a los cuales acabar y como ves ahora estoy aquí.
-MMM…  Algún día esto cambiara y dejaremos de luchar.
-Eso es algo que dudo, yo no tengo esperanzas de que esto se acabe, para mí esto se puede controlar, mantener a los demonios a raya, salvando a las personas que podamos salvar, para mí la vida siempre será una lucha eterna contra los demonios.

Mientras Yiotish y Damián conversaban alguien escondido los estaba observando y escuchando, era Hakampuma.

Continuara…

Escrito y Editado por Mí.




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miércoles, 19 de febrero de 2014

Haborym El Demonio de Fuego

Bueno continuemos con un poco más de historia, así como le daremos algo más de historia sobre sus orígenes a los personajes:

Haborym El Demonio de Fuego




 Libro 3
(Casando al Demonio)

Capítulo 2
La historia de Yiotish

La noche es fría, nuestros héroes han sido llevado a varios cuartos a descansar, todos parecen descansar, pero la adrenalina despegada el día de hoy no los deja dormir, y al igual que ellos muchos en el poblado no duermen, están alertas por si los demonios pretenden volver, Yiotish ha salido de su habitación y se dirige a la plazuela de Tristán, está vacía, a pesar de ser un monje y de tener como costumbre y tradición meditar para así calmar su alma afligida, este no ha podido lograr, savia desde que era niño que el camino de un monje no es nada fácil, apenas tenía 10 años cuando abandono su hogar, producto de los maltratos de su padre alcohólico, aún recuerda ese día, corría lo más que podía para que su progenitor no lo alcanzara ya que este en un accidente había botado al piso todo el vino que su padre compro el día anterior, estaba furioso y lo mataría, ese día abandono a su madre y sus 2 pequeños hermanos, un peso que hasta ahora carga encima, recuerda que después de eso estuvo vagando por los pueblos cercanos, robando frutas en los mercados y tomando agua de los canales de regadíos agrícolas para sobrevivir, hasta que un día un comerciante lo pesco robando, el trato de escapar pero estaba muy débil y fue alcanzado por el comerciante que le iba a dar una paliza, pero su primer golpe fue bloqueado por un monje de Ivgorod, quien a su vez le pago por la fruta robada, el pequeño Yiotish, siguió al monje, este se dirigía a un antiguo templo done se puso a meditar, en ese instante Yiotish vio algo que lo asombro, de repente el cuerpo de aquel monje comenzó a emitir un aura dorado, el monje dejo a un lado su meditación y le pregunto a Yiotish que hace acá, este le conto su problema y el deseo de ser fuerte para defenderse de aquellos que lo maltratan, el monje lo invita a ir con él al templo donde entrena en las tierras de Ivgorod y fue así como él se convirtió en monje.

Pasaron 10 años hasta que Yiotish al fin pudo ser ungido como un verdadero monje, 10 años y aun pensaba en volver al hogar de su familia, un pensamiento que no logro desterrar de sus corazón, quería ver como estaban las cosas, pero el Gran Patriarca del templo tenía otros planes para él y lo envió a Nueva Tristán, con la orden de no salir de aquí a menos que un peligro exterior amenace esta ciudad. Ya han pasado 5 años desde que llego y gracias a sus grandes habilidades en las artes marciales, rápidamente pudo llegar a convertirse en capitán de las fuerzas defensivas de esta ciudad, durante 5 años hubo paz, hasta hace un tres días cuando los muertos salieron de sus tumbas a atacar a la gente de la ciudad.

Continuara…

Escrito y Editado por Mí.




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domingo, 2 de febrero de 2014

Haborym El Demonio de Fuego

Y bueno continuamos con un nuevo libro (la tercera parte de esta historia.

Haborym El Demonio de Fuego



 Libro 3
(Casando al Demonio)

Capítulo 1
El Último Horadrim: Deckar Caín

10 minutos después de la huida de Raptor en Nueva Tristán, Hakampuma ve llegar a sus camaradas

-¿Que paso con el demonio?- Les pregunta pregunta Hakampuma mientras se acerca a Arthas. 
-El maldito escapo y ahora no sabemos a dónde se fue.
-No es así, recuerda que lo que nos dijo ese chaman. – Le responde Yiotish a Arthas.
-Es verdad los objetivos de Raptor, son destruir Tristán y liberar a un poderoso demonio.
-¿Si pero en donde esta encerado ese poderoso demonio?

En ese instante aparece Kael todo ensangrentado y se lanza contra Hakampuma.

-Demonio voy a acabar contigo.
-¿Qué?

Y antes de que Kael pueda lograr golpear a Hakampuma es detenido por Yiotish

-Espera  él no es un demonio.
-Lo vi convocando mostros que salían de los cadáveres de los demonios.
-Eso es porque él es un Santero, sus poderes pueden ser en algo parecidos a un Chaman demoniaco o a un nigromante.
-Nigromante, Malah alguna vez me conto sobre estos sujetos que nos ayudaron hace 20 años, pero la descripción que me dio no se parece a la de este sujeto.
-Si no se parecen físicamente en nada aunque espiritualmente pueden ser muy parecidos, a es verdad quien eres tú.
-Yo soy un orgulloso guerrero Bárbaro del Monte Arreath.
- Que raro creí que los barbaros se habían extinguido y por la manera en la que has quedado más pareces uno de esos demonios que has matado. – Le contesta José.
-Ja Estas heridas no son anda para mí.
-Si debe ser así, los barbaros son famosos por su fuerza bruta, su dureza en batalla y su gran orgullo, tan grande como el monte Arreath. – Agrega Austei.
-Mira quién habla de orgullo, el rey de los hechiceros egocéntricos.
-Soy un arcanista no un hechicero  Truhan y ya deja de mirar mis libros de hechizos con esos ojos codiciosos.
-Ya suficiente. – Interrumpe Damian en la discusión. - ¿Qué haces aquí Bárbaro, estas muy lejos de tus tierras?
-He venido a buscar un motivo por el cual luchar.
-Pues si quieres pelea, ven con nosotros que siempre andamos metidos en luchas contra demonios infernales y ahora estamos cazando a uno muy poderoso. – Le responde Hakampuma, quien llama a sus perros zombis.
-Entonces iré con vosotros.
-Que bien otro fenómeno para el circo. – Menciona Austei, mientras José le responde.
-Y lo dice el payaso.
-jajajaja.
-Ya basta de tanta tontería hay que localizar al demonio. – Grita Arthas.

En eso unos pobladores de Tristán se acercan.

-Disculpen señores, pero la gente del pueblo quiere agradecerles su ayuda.
-No tienes por qué darlas hombre.
-Yiotish no te reconocí, así que estos eran los hombres con que partiste para detener las hordas de muertos que nos atacaban.
-En realidad los hombres que me acompañaron están muertos, solo sobrevivieron Austei, José, Damian y yo, los demás los conocí en el camino, pero te prometemos que terminaremos con esto con nuestra vida.
-Habla por ti solo – Le responde José.
-¿Qué?
-Que terminaremos con esos demonios. – Contesta José, mientras se aleja murmurando. -  Si es que no acaban con nosotros antes.
-Yiotish, Deckar Caín quiere verlo en este momento, está en la catedral.
-Bien entonces vayamos, estoy seguro que el podrá ayudarnos a localizar a este demonio.

La caravana entra al pueblo y siguen por un largo camino, hasta llegar a la Catedral de Tristán, ahí un hombre viejo, de larga barba acompañado de una joven chica los espera y a la vez les daba la bienvenida. Su nombre es Deckar Caín, el último descendiente de una antigua secta de magos formada por el arcángel Tyrael quienes lucharon, derrotaron y enceraron en las Piedras del alma  a los Tres Demonios Mayores (Baal, Nefisto y Diablo), los antiguos líderes del infierno y las hordas demoníacas.

-Durante los últimos años, le rogaba al cielo que algo como esto, no sucediera, pero sucedió. – Menciona el viejo Caín. – Ahora dime Yiotish ¿Qué es lo que has logrado averiguar? Veo que has encontrado guerreros muy buenos.
-Pues sí y lo que averigüe, es una historia un poco larga, y no tenemos mucho tiempo para contarte los detalles, solo te diré que esto fue una trampa para liberar a un demonio llamado Raptor, el cual busca liberar a otro demonio más poderoso al cual le dicen el Demonio de Fuego.
-Haborym.  – El semblante de Caín se estremece al  solo pronunciar su nombre. -  He leído algo sobre este demonio, se revelo contra Diablo y este lo desterró a un lugar desconocido hace siglos, nunca pensé que podría llegar a manifestarse en este mundo, debe ser uno de los efectos de la destrucción de la “Piedra del Mundo”.
-Cuéntanos que más sabes tú o sabio Horadrim para mi Arthas es un honor conocer al último de los Legendarios Horadrims.
-Gracias por tu alago y con lo que respecta a Haborym, según recuerdo existe un artefacto llamado Cubo Nephalem, dicen que puede usarse para deshacer objetos a sus elementos básicos y también para abrir portales a otro mundo, si Haborym quiere manifestarse en este mundo, ese demonio Raptor ira por ese artefacto.
-¿Tu sabes donde esta ese artefacto?
-Los rumores dicen que se encontraba en el Monasterio de las Arpías, aunque otros apuntan a que este fue robado por Arpías rebeldes y escondida, pero la verdad es que solo las Arpías tienen las pistas para su ubicación, de seguro Raptor también sabe eso y se dirige así allá.
-Entonces ya no perderemos tiempo, descansaremos esta noche acá y mañana temprano partiremos rumbo al monasterio de las Arpías. – Pronuncia Yiotish.

Continuara…

Escrito y Editado por Mí.



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