"Haborym El
Demonio de Fuego"
Libro 1
(La Reunión de los
Héroes)
Capítulo 1
Una Amenaza se
Acerca
Siempre había visto a Yiotish como un referente de
disciplina y estoicidad. Sus oraciones y liderazgo habían impulsado al pueblo
en los momentos más oscuros. Sólo la luz de Tyrael era más inspiradora. Y
quizás esta vez íbamos a necesitar a Tyrael, porque la luz de Yiotish apenas
parecía una vela con la mecha corta dentro de la oscuridad que nos rodeaba.
Se escuchó el crujir de una rama en lo que me pareció que
eran 10 metros hacia atrás en el bosque.
Pese a que todos nos alertamos por el sonido que venía de
la retaguardia, se trataba sólo de un caballo ¿Pero qué podría estar haciendo
un caballo por estos lugares sin su jinete?
Me acerqué a ver con más detención al animal. Su montura
llevaba el emblema de Nueva Tristrán. El caballo relinchó con un sonido opaco,
algo andaba mal con ese animal. La bestia giró su cabeza y de un mordisco me
arrancó una oreja.
Yiotish reaccionó rápidamente aturdiendo al caballo con
un golpe, arrojándolo 4 metros con otro y finalmente partiéndolo en dos con un movimiento
final.
Yiotish:
¿Sabes lo que esto significa, no?
Fulgre:
Sí, es caballo no sólo me hirió, me contaminó. Estoy
condenado.
Yiotish:
Te podemos dejar aquí o podemos terminar con esto de una
vez. Haremos lo que tú digas.
Una expresión de horror se dibujó en mi cara al sentir
tan cerca la muerte.
Fulgre:
¡Déjenme! ¡Yo no les he hecho nada! ¡No quiero morir
asesinado por mis compañeros!
Yiotish:
Muy bien, pero no nos podrás acompañar. Cuando nos veamos
de nuevo serás sólo un zombie y te tendré que destruir ¿Lo entiendes?
Fulgre:
¡Fuera, Váyanse!
Me recosté sobre un árbol, temblando de frío a medida que
la fiebre aumentaba.
Esa fue la última vez que alguna vez vi a un humano. Pero
lamentablemente el destino no quiso que ese fuera mi fin.
A medida que perdía la consciencia, comencé a ver cosas
terribles. Hordas de muertos vivientes pasando frente a mí ¿Por qué me
ignoraban? ¿Acaso sabían que pronto sería uno de ellos? ¿Estaba alucinando?
Estaba demasiado débil para pensar. Pronto llegaría mi hora.
Una figura comenzó a acercarse a mí, era un hombre
vestido con capucha y túnica. Me tomó de los pies y me comenzó a arrastrar.
Estaba demasiado débil para luchar. Sólo alcancé a gemir, ante lo que él ni
siquiera volteó. Me llevó cerca de otro árbol. Para mi horror había otros
aldeanos gimiendo al rededor.
El hombre pasó una soga al cuello de unos, a los pies de
otros y a mí me ató de las manos. Escuché el relinchar de caballos y
súbitamente estaba colgado del árbol. El hombre comenzó a recitar unos versos
que no pude entender y finalmente comencé a escuchar un ruido de cuchilladas y
gemidos.
Sentí como un cuchillo atravesaba mi interior y dejaba
salir mis intestinos.
Desperté atado a este árbol sin poder moverme ni decir
palabra. No estoy seguro si estoy muerto, sólo sé que este árbol se mueve, que
puede leer lo que pienso y he escuchado cómo los demás aldeanos gritan de
angustia al ver como esta monstruosidad se acerca al pueblo. Pero los escucho
como en un sueño, como dentro de mi mente.
Con los días cada vez estoy más convencido que somos
fantasmas y que estamos ligados a este árbol.
Oh, Yiotish ¿Serás capaz de destruir esta criatura y
liberarnos?
Escrito por “Ronok”.
Reeditado por mí.