domingo, 25 de agosto de 2013

Haborym El Demonio de Fuego


Haborym El Demonio de Fuego



Libro 1
(La Reunión de los Héroes)

Capítulo 3
El recado

No habían pasado más de dos horas desde que partí de mi hogar en busca de aquel hombre sobre el que varios me habían comentado, y que, al parecer, era el único que podría ayudarme en estos días obscuros que se acercaban.
Llevaba con migo un bolso que contenía un objeto bastante misterioso y al parecer poderoso. Según me había comentado, este hombre sabría más acerca del tema que cualquier otro en esta región, así que no veía la hora de entregárselo.
Con la ayuda de algunos campesinos del pueblo nos abrimos paso a través de los pastizales hacia nueva Tristram. Éramos 6 hombres al partir, y solo 2 al llegar. No podría asegurar con total firmeza lo que sucedió en aquellos pastizales, pero, a juzgar por los gritos de horror y el ruido de los huesos quebrándose en la distancia, creo que fui afortunado en salir con vida.
Al llegar al pueblo nos encontramos con un gran caos, la gente corría de aquí para allá en pánico. Algunos gritaban cosas acerca del fin del mundo, otros aprovechaban para vender sus armas a precios elevados, y otros se servían del caos para saquear a los vendedores ambulantes. Escondí mi bolso entre mis ropas por miedo que me fuese saqueado también.
Mi compañero y yo nos separamos al llegar a la entrada norte del pueblo. Luego de preguntar a varias personas, me dijeron que la persona que buscaba se encontraba en la taberna junto a un grupo de hombres, que al parecer planeaban formar una pequeña milicia para defender el pueblo.
La taberna se encontraba al sur del pueblo, así que debía hacer un gran recorrido circular para llegar allí, y como no podía darme el lujo de perder más tiempo, decidí tomar un pequeño atajo por el bosque.

Las ramas secas crujían en mis pies mientras trotaba hacia mi destino. No faltaban más de 10 metros cuando vi la luz de la taberna a lo lejos. Creí que ya estaba seguro, cuando de repente comencé a escuchar unos horrendos quejidos que se acercaban hacia mí desde las sombras. Comencé a gritar pidiendo ayuda. Unos hombres que se encontraban en la puerta de la taberna me vieron y se acercaron lentamente...pero fue demasiado tarde.
Sentí como mi carne era desgarrada de mis piernas y brazos, mientras un aliento a putrefacción me hacía perder el conocimiento...el bosque estaba lleno de zombies hambrientos, y mi carne los estaba saciando....quizá debería haber tomado el camino largo después de todo.
Con la última voluntad de mi ser, logre arrojar mi bolso hacia los hombres que me observaban aterrados a unos metros. "Es para Yiotish" grite...

Escrito por Dyzan
Editado por Swordzack.




Nota: Todas las imágenes, vídeos y escritos son propiedad de sus respectivos dueños. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario